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ADICAE en el XIX Congreso Mundial de Consumers International: El desafío de reforzar el poder de los consumidores
Bajo el lema "Fortaleciendo los consumidores del mañana", Consumers International, que reúne a Asociaciones de Consumidores de todos los continentes y a la que ADICAE pertenece, dio comienzo a su 19º Congreso internacional, donde el problema de los servicios financieros ocupa un lugar destacado dentro de sus debates y jornadas.
En la inauguración del congreso intervino en primer lugar Anthony Cheung, presidente del Consejo de Consumidores y Usuarios de Hong Kong, quien hizo un llamamiento a los casi 700 participantes en representación de 60 países a aprovechar el desafío que impone la globalización y dar una respuesta histórica a los problemas de los consumidores golpeados por una crisis económica y financiera que ha afectado de manera intensa aunque desigual a todos los países, pero también por los riesgos medioambientales. Es de destacar la apelación que el señor Cheung hizo de la exigencia de compromiso y solidaridad como factores claves que deben servir para plantar cara a estos retos. Una solidaridad, cabría añadir que debe ser impulsada desde las propias organizaciones de consumidores, enn una sociedad atomizada y despreocupada.
Donald Tsang, jefe ejecutivo del gobierno autónomo de Hong Kong, puso a esta ciudad como ejemplo de "paraíso" para los consumidores que, sin embargo, exige una permanente atención a los problemas que plantean a diario de los consumidores para seguir generando la confianza necesaria. El ritmo vertiginoso de Hong Kong es un paradigma de los cambios veloces de la globalización y, en consecuencia, de la exigencia de dar una respuesta rápida a los problemas de los consumidores por parte de sus asociaciones. Para el señor Tsang, hay que saber aprovechar las oportunidades que ofrece el nuevo escenario de la nueva sociedad en red, que permite nuevas y mejores formas de información y relación.
Por último, Samuel Ochieng, presidente de Consumers International, hizo un balance de los últimos cuatro años, en los que Consumers International ha logrado colocar en la agenda de organismos internacionales los problemas de los consumidores. En particular destacó la inclusión del problema de la "comida chatarra" (sin unos mínimos de seguridad y calidad aceptables para la salud de los consumidores) en los debates de la Organización Mundial de la Salud. Pero sobre todo, trasladar al G-20 la voz de los consumidores de servicios financieros a través de una serie de propuestas concretas de actuación que han sido recogidas por este organismo.
Conviene recordar que ADICAE no sólo colaboró en esta campaña de información al los países participantes en las reuniones del G-20, sino que remitió un petición expresa al presidente del gobierno español para que incluyera una serie de actuaciones concretas en defensa de los usuarios de serviciosn financieros. Para Samuel Ochieng, el mundo y la situación d elos consumidores ha cambiado mucho desde 2007. A la grave crisis financiera y económica, se ha unido el retroceso en la protección al medioambiente (con los recientes desastres nucleares de Japón y del vertido de petróleo en Méjico) y se ha asistido a la definitiva explosión de países como China, Brasil, India, como nuevos y poderosos actores económicos globales. Asimismo, hizo hincapié en la revolución de las redes sociales, cuyo susuarios superan la población de muchos paises y plantean retos que resolver pero también oportunidades para mejorar e impulsar nuevos mecanismos para defender los derechos de los consumidores. El objetivo es que todos estos nuevos factores constituyan el punto de partida para que las asociaciones podamos hacer de los consumidores y usuarios la principal fuerza social capaz de exigir a los gobiernos reglas para defender y representar los derechos con mayor eficacia.
Fortalecer a los consumidores en la economía verde
La Comisaria Europea de Acción Climática Connie Hedegaar planteó en su intervención las oportunidades y retos que supone para los consumidores la lucha contra el cambio climático. El "poder del monedero", como calificó la Comisaria el potencial de los consumidores para afrontar este papel, tiene ante sí un panorama que provoca preocupación.
En 2050 habrá 9.000 millones más de personas, con una calidad y nivel de vida mejor pero con un alto riesgo de agotar los recursos del planeta. Puso algunos ejemplos concretos en el ámbito de las reservas de agua o de los bancos marinos, pero sobre todo incidió en la paulatina mejora de vida para millones de habitantes en países como China, Brasil, India, Sudáfrica... Con este ritmo, prácticamente serían necesarios dos planetas y medio para dar satisfacción a las necesidades y apetencias de estos nuevos consumidores. De hecho, en las últimas décadas la temperatura media del planeta ha crecido entre 4 y 6º, por lo que el escenario futuro nos sitúa ante un clima incierto que provocará desequilibrios naturales y, por lo tanto, económicos y sociales. La respuesta está en impulsar un modelo de crecimiento 'verde', es decir, que a largo plazo sea duradero y no dañe el planeta hasta agotarlo.
Para la Comisaria Europea hay muchas maneras de afrontar este objetivo. La transición hacia una 'economía verde' necesita de la participación de los consumidores en todas estas vías. En primer lugar, presionando a sus gobiernos para que destinen un porcentaje de su PIB -que cifra en un 1,5%- en incentivar el desarrollo de energías alternativas no contaminantes, pero sin olvidar que la mejor política inversora es aquella que contribuye a ahorrar.
Las políticas públicas deben servirse de incentivos fiscales que hagan entendible a las empresas que la reducción de gases nocivos no contribuye a reducir sus beneficios, sino que actualmente suponen incluso una oportunidad para una nueva economía basada en la racionalidad y el máximo aprovechamiento de los recursos con el mínimo desgaste y deterioro de los recursos naturales. Hasta ahora esta política empresarial de ahorro en energía se ha dirigido fundamentalmente hacia los electrodomésticos, pero el objetivo fundamental es el sector automovilístico y la vivienda. En este ámbito concreto para 2020 el 80% de las nuevas viviendas que se construyan serán, seguramente, 'viviendas inteligentes' que minimicen el gasto en energías contaminantes. Asimismo, las políticas públicas deben incentivar un uso responsable de la energía en aras de un ahorro en el empleo de la misma. De hecho, economizar el uso de la energía del orden de un 20% del consumo actual es una cifra suficiente sin que ello implique sacrificios apreciables.
Por último, el consumidor con sus actos aislados puede contribuir a empujar este tránsito hacia una 'economía verde'. Sin embargo se enfrenta a una serie de problemas, como la escasa toma de conciencia de las consecuencias de sus actos y decisiones de consumo. Ello trae como consecuencia que todavía son una minoría de consumidores los que adquieren productos verdes. Un estudio reciente de Consumers International determinó que en 2007 sólo el 50% de la información que ofrecen las empresas sobre esta cuestión es cierta. Por lo tanto, es necesario establecer unas exigencias de información que garanticen con claridad y certeza la naturaleza y consecuencias del uso de determinados productos que se ofrecen al consumidor.